sábado, 16 de marzo de 2013

Las dos siguientes:


07/03/13

El concepto cultura, como señala Umberto Eco es ambiguo. Desde aspectos y reglas que rigen la conducta humana, conjunto de conocimientos, aprendizaje, acumulación de tradiciones, creencias, simbología e identificación grupal, y tantas y tantas definiciones más con cabida.

Sin querer sentar doctrina, se podría decir que la cultura en la práctica, es una construcción mental fruto del proceso de socialización del individuo o sea que, factores de influencia externa condicionan nuestro proceso de “culturización”. Los padres, la familia, la escuela, nuestros grupos, son nuestra referencia (cuidado, en la infancia y durante la juventud). Pero…. en la etapa adulta, que funcionamos por libre, hay alguien que se ocupa de inyectarnos cultura, ¿Quién? Nuestros administradores, nuestros gobernantes, nuestros vigilantes, nuestros invitados a comer y a cenar sin que estén sentados en la mesa, se ocultan tras la pantalla del TV. En forma de televisión pública, sí, la del servicio a toda la ciudadanía.

Cuando conectamos Intereconomía, Tele5 o la Sexta ya sabemos que encontraremos. Pero cuando conectamos TV1, TV3, TV Mallorca del Josep Ferran, TeleMadrid o Canal Sur, si te identificas con la doctrina reinante estás en tu salsa pero si no, ves con desasosiego que utilizan tu dinero para ir contra ti. Sientes lo que Drácula cuando le abren el ataúd a plena luz del día. ¿Por qué el poder emplea los medios de comunicación para su beneficio y utiliza a la masa como si fueran componentes de un rebaño?

Ultimamente tengo la sensación de que para un periodista trabajar en la TV pública debe ser, como para un médico trabajar para Jack el Destripador

08/03/13

En respuesta al mensaje de Silvia Martinez:

Hola!

En referència al comentari que feia al meu primer missatge sobre que l’objectiu dels informatius és que l’espectador faci d’allò que veu i escolta la seva pròpia opinió, he recordat les paraules de l’escriptor Giovanni Sartori pel documental “Voces contra la globalización” que vaig treballar en una altra assignatura (oi José Luís Corral?, recordo haver compartit debats amb tu):

"Se habla siempre de la voz del pueblo, pero la voz del pueblo es un reflejo de los medios de comunciación. Ven la televisión y luego la gente dice lo mismo. ¿Cuál es la fuente de esta voz? No es el pueblo, es el mensaje televisivo".

Més informació sobre el documental al meu blog ;-)

Cierto Sivia, recuerdo los debates. En un mundo globalizado, comercialmente ya practicamente concluido, restan otros aspectos más trascendentes por globalizar, entre ellos el económico y el político.
Parece que los medios de comunicación son una buena herramienta al servicio de los "globalizadores".
Los "globalizados" son los individuos, cada vez más idividuales aunque parezca que no

2 comentarios:

  1. Hola José Luís,
    Estoy empezando a devorar el blog y me parece interesante ya que el texto está muy bien estructurado y tu particular visión hace la lectura muy amena.
    Te dejo mi punto de vista sobre esta entrada. Antes de exponer nada quiero dejar claro que no pretendo crear opinión, informar, o dictaminar, únicamente aprovechar para divulgar mi punto de vista para que con suerte me puedas aportar más.
    Bajo mi punto de vista fruto de mi proceso de socialización, conceptos cómo “masa” y “rebaño” no son los que mejor abarcan a la totalidad de la población, puesto que muchas personas tenemos o creemos tener la capacidad de pensar por nosotros mismos y no vemos los medios de comunicación como un punto de información, sino como un punto de vista, que en mayor o menor medida aceptamos, valoramos o interpretamos. El “rebaño” y las “masas” aceptan en gran parte, valoran muy poco y apenas interpretan.
    Qué hay de esa oveja que no acepta dejarse influenciar por lo que le dice su entorno? Es una oveja que no quiere seguir a su “pastor”, sin embargo, no puede valerse por sí misma en un prado donde todas las parcelas tienen dueño. Puede estar más o menos de acuerdo con el “pastor” que lleva el “rebaño”, quizás no comparta su forma de conducir a la “masa”, pero si no lo conoce bien, jamás encontrará un equilibrio, ya que hay que aceptar que su lugar es ese “rebaño”.
    Por ello, las personas, de una forma u otra, nos vemos con la imperiosa necesidad de comprender el punto de vista de los demás (personas, medios de comunicación, etc.). Para poder sobrevivir en este mundo y ser felices, se debe tener en cuenta todo lo que le rodea y aceptarlo que para sobrevivir, es decir, debemos seguir al “rebaño”. Por mucho que uno piense e intente salir de él, es imposible. Como una vez se comentó, es una esfera que jamás acaba, siempre vuelves al mismo punto en el que intentas mejorar después de cada vuelta.
    Me gustaría saber, como “oveja” que me siento, quien es el dueño del “rebaño” ya que los pastores los vemos a diario, pero nunca me han dicho a quien pertenecemos. Me puedes dar la respuesta?
    Como citas en tu artículo “la cultura en la práctica, es una construcción mental fruto del proceso de socialización del individuo”, sin embargo, pienso que aunque todos tenemos una socialización en nuestra vida, no todo el mundo se culturiza al mismo nivel, ya que en una etapa adulta de la vida la cultura se auto-inyecta y por muy descabellado que parezca hay personas que únicamente se preocupan de envejecer y no de crecer.
    Ya para acabar quiero hacer referencia al escritor y filósofo (entre otros) Jean-Jacques Rousseau, cuando en una de sus más celebres frases decía que “El hombre nace libre, pero en todos lados está encadenado”. Los medios de comunicación son el súcubo de nuestra sociedad, nos dan las cadenas y nosotros mismos nos las ponemos, ellos bailan como marionetas por dueño de las ovejas, al que como nadie ve, nadie puede quejarse.

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    1. Bueno Toni, ya que citas a Rouseau te comento que él, fue uno de los ideólogos utilizado por las élites burguesas del siglo XVIII para llevar adelante una revolución que se cargó al Antiguo Régimen y sus tres poderes (nobleza, clero y ejército) para sustituirla por un nuevo régimen, el parlamentarismo y la clase política con sus tres poderes (legislativo, ejecutivo y judicial) supuestamente divididos.
      Uno de los libros básicos de Rousseau habla del “Contrato Social”, un hipotético acuerdo suscrito entre el Estado y los ciudadanos. Para Rousseau el Estado dispone de la autoridad moral y legislativa a la que los ciudadanos se someten para que sea garantizado el orden social, y los ciudadanos a su vez, disponen de una serie de derechos que el Estado garantiza a cambio de cesión de parte de esa libertad natural con la que, supuestamente, se nace. De todo esto hay mucho de lo que hablar aunque Rousseau no es objeto en este momento del blog, sino los medios de comunicación y su papel en la sociedad.
      Como tú comentas los medios de comunicación son unos instrumentos de los que se obtiene información o no, y cada uno interpreta a su manera. El problema viene de la propia estructura del sistema.
      Los medios de comunicación son una pieza intermedia entre el poder y la ciudadanía. El poder tiene interés en el control social, es decir que la sociedad no haga nada que a él no le vaya bien y que haga y piense lo que a él le conviene. Para ello lanza mensajes que llegan a las mentes de los ciudadanos (discursos, noticias, imágenes, críticas y propuestas de acciones, etc.) todas ellas manipuladas gracias a la versatilidad del lenguaje y sobre la base de la repetición.
      Para ello debe “adormecer” la capacidad de razonar de las personas, nada debe ser cuestionable y lo que es cuestionable, es el mismo poder quien lo lanza una vez que ya no es de su interés ocultarlo. No quiere decir que lo consiga pero lo que sí consigue es la parálisis y la imposibilidad de acción salvo que se forme parte del “grupo”. Y el control del grupo es sencillo, aunque sea fiero; hasta los perros de presa son dominados por el adiestrador.
      A mi juicio, no es inconveniente estar en el rebaño, lo malo es ser del rebaño.

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